Ingredientes:
- 8 huevos medianos
- 150 g de azúcar
- 150 g de mantequilla
- 250 g de chocolate para fundir (suelo usar Nestlé Postres)
- 125 g de harina
- 25 g de cacao puro en polvo. Si no tenéis, podéis sustituir por harina
Preparación:
Batimos los huevos con el azúcar, usando unas varillas hasta que clareen un poco.
Fundimos el chocolate troceado, con cuidado que no se queme. Una vez derretido y templado, añadimos el chocolate y la mantequilla a la mezcla de huevos y azúcar y mezclamos bien.
Tamizamos la harina y el cacao, y lo agregamos a la mezcla con cuidado, hasta que estén bien integrados.
Preparamos 18 moldes de aluminio pequeños (de los de flan desechables) untándolos con mantequilla, y espolvoreándolos con cacao, para que no se pegue la masa. Llenamos los moldes entre 1/2 y 3/4 de su capacidad.
Una vez rellenos los metemos en el congelador por lo menos 1 hora. Conservamos en el congelador hasta su consumo.
Cuando queramos prepararlos, precalentamos el horno a 200 º C, bajamos la temperatura a 180º, introducimos los coulants, y horneamos unos 18 min. Cuando están listos, se infla el centro ligeramente, como si fuese una magdalena.
Sacamos del horno, e inmediatamente, con cuidado de no quemarnos, desmoldamos los coulants, y servimos. Yo les paso un cuchillo redondo por el lateral para despegarlo, y le doy la vuelta al molde con suavidad… También puede cortarse el molde, pero a mi se me rompen, porque son muy delicados…
Recomendable, tomarlos con una bola de helado de vainilla o de chocolate blanco…
Y ahora veamos quien se ha comido el de la foto…
Pingback: Un postre para esta noche | EntrePasteles